jueves, 23 de febrero de 2012

DIAGNÓSTICO Y OPERACIÓN

Todo empezó en el mes de Abril del 2011.

Debo comenzar mi relato, contando que hace 2 años se me presentó una oportunidad; estudiar un curso de Filosofía y Metafísica, curso maravilloso!! donde no sólo conocí a personas adorables, sino que empecé a conocerme a mí misma!!
Al finalizarlo, me diagnosticaron la enfermedad. En ese momento entendí para qué Dios me puso este curso en el camino, para prepararme espiritualmente y para poder sobrellevar lo que se venía.
En este curso, aprendí que somos seres perfectos, espirituales y divinos, aprendí a amar y a ser amada, aprendí que esto es lo más importante en la vida, aprendí que la vida es y será maravillosa siempre, pase lo que pase, aprendí a procesar lo que venga y como venga, a que las cosas fluyan por si solas y ha aceptarlas como son, con la mejor actitud, siempre positiva.
Nunca me pregunté ¿por qué? siempre ¿para qué?

"TODO PROBLEMA LLEGA ENVUELTO EN UN REGALO Y EL REGALO SIEMPRE ES MÁS GRANDE QUE EL PROBLEMA" (lo leí en un libro que me regaló un prima, una biografía de una Señora que vivió lo que yo estaba viviendo) desde que lo leí pensé que ésta iba a ser de ahora en adelante mi frase favorita.

A mis 54 años de edad, gracias a un aviso divino, me diagnosticaron Carcinoma Diferenciado de Ovario Izquierdo, con metástasis en las Trompas de Falopio, Endometrio y en 3 Ganglios pararenales, con un estadío de 3.C (el máximo es 4).
Si, era un cáncer agresivo, pero como bien me dijo el Doctor "tienes un ángel que te envió un aviso".
En ese instante entendí que ganaba esta guerra que se me presentaba, pues "guerra avisada no mata gente", aún me queda mucho por hacer en esta vida!
Este aviso, fue un sangrado vaginal que tuve mientras estaba de viaje en Sydney-Australia donde radica mi hija, fui 3 semanas a pasar unas lindas vacaciones junto a ella y tuve unos pequeños y espaciados sangrados vaginales, no les dí importancia, pues pensé que no iba a malograr mis vacaciones y que regresando a Lima iba al médico, además no tenia ningun dolor u otro síntoma.

De regreso a Lima-Perú, donde radico con mi esposo y ahora con mi hijo, pues en ese entonces él estudiaba en Edimburgo-Escocia y estábamos solos mi esposo y yo, solicité una cita con mi ginecóloga y además de los exámenes anuales de rutina, me mandó ha hacer una Tomografia de abdomen completa y me hizo un legrado en el Útero y en el Endometrio por el tema del sangrado vaginal.
En el resultado de la Tomografía, salíó que tenía el Ovario izquierdo casi de 4 cm, lo cual para mi edad era anormal, por lo tanto la ginecóloga junto con un cirujano oncólogo decidieron operar, hacer una Histerectomía Radical.
Antes de la operación, salió el resultado del legrado uterino, donde indicaba que se trataba de un Carcinoma pobremente diferenciado, así que afronté la operación sabiendo que tenía Cáncer, lo que no sabía era cuanto había crecido dentro de mi cuerpo. A parte también me habían hecho análisis de Marcadores Tumorales CA 125 (de ovario) el cual salió alto.

No voy a negar que antes de la operación, tuve noches oscuras, noches enteras llorando, noches enteras sin dormir, hasta que llegó la Luz y pensé si esto me está pasando, bienvenido y bendecido sea! Para algo servirá, para fortalecerme, para ser más tolerante y para entender muchas cosas más que irán saliendo en este proceso. Pensé será para mi bien, siempre para mi bien!!

Debo confesar que lo más duro fue tener a mis hijos lejos y ausentes, que no estuvieran a mi lado y acompañando a su padre durante la operación. Fue duro decirles lo que estaba ocurriendo por teléfono, fue realmente muy duro! pero por la premura de la operación y por lo lejos que estaban era imposible que llegaran a tiempo.
En esos momentos afirmé que la familia es muy importante. Mi esposo tiene una cuantiosa familia y yo una familia pequeña, pero igual todos estuvieron unidos acompañándolo durante las 7 horas que duró la operación.
Descubrí que soy una persona muy querida, y eso me llena de alegría, he recibido innumerables muestras de cariño de familiares y amigos que nunca imaginé!

La operación se realizó el 10 de Mayo del 2011, la recuperación fue muy rápida y totalmente superable, me sentía muy bien, siempre positiva, con mucha energía y con la energía que recibía por parte de familiares y amigos con diferentes manifestaciones de afecto y compañía. Nunca tuve tantas flores en mi casa, no me cansaba de verlas, ellas me traían el amor de las personas que me las enviaban, también recibí libros, medallitas, estampas, oraciones, misas, llamadas, emails, tesoros que guardo como joyas, pues estas muestras de cariño, son las que me levantaban cuando me quebraba.

En esos días ya en mi casa recibí una hermosa sorpresa, vino mi hijo por 2 semanas, esto ayudó mucho a mi recuperación.